Enclavada en plena Costa da Morte, y conocida por su famoso encaje de bolillos trabajado por las palilleiras, mujeres que hacen verdaderas obras de arte, Camariñas es el tesoro de las costas gallegas, ofreciendo un litoral espectacular desde Camelle hasta el Cabo Vilán y su majestuoso faro de 125 metros de altura.
Camariñas, la autenticidad gallega
Camariñas ocupa una península con dos caras, una mirando al Atlántico y otra a las tranquilas aguas de la ría y su puerto, donde los pescadores apilan sus capturas tras la jornada, fundamentalmente de sardina y pulpo.
El Museo do Encaixe honra su tradición del encaje, mientras que el legado del artista “Man de Camelle” se revive en el Museo do Alemán, construido con materiales naturales como rocas, conchas y palos del mar.
El Cementerio de los Ingleses recuerda naufragios históricos, y la duna rampante Monte Branco es toda una maravilla natural con sus 150 metros de altura.
Tres rutas de senderismo exploran el litoral, y múltiples playas como Trece y Ariño ofrecen escenarios tranquilos para el descanso y la contemplación.
Que ver:
Puerto de Camariñas
Como referente pueblo marinero, uno de los principales atractivos de Camariñas es su puerto. Ubicado a un costado de la ría junto a la desembocadura del río Grande, el puerto camariñán está siempre animado y es un placer visitarlo en cualquier momento para observar el continuo ir y venir de los barcos, además del trabajo de los pescadores apilando sus nasas y manejando los aparejos de pesca.
El de Camariñas es quizás el puerto pesquero más importante de la Costa da Morte y provee de sardina y pulpo de excelsa calidad a la lonja local, donde marineros y clientes dirimen la puja de las mejores piezas que luego se cocinan en los mejores restaurantes de la provincia de A Coruña. Merece la pena también acercarse al Club Náutico donde existe la posibilidad de realizar actividades y alquilar barcos a vela, kayaks o tablas de paddle surf.
Museo do Encaixe
Camariñas es sin duda sinónimo de encaje, un oficio tradicionalmente femenino en el que las palilleiras mueven sus dedos a toda velocidad haciendo verdaderas obras de arte con los palillos o bolillos. Arte reconocido a nivel internacional y transmitido de madres a hijas y de abuelas a nietas durante siglos en esta localidad.
El Museo do Encaixe acoge una exposición permanente compuesta por diseños y piezas únicas de encaje, además de diversos materiales y utensilios necesarios para la elaboración. Además, cada Semana Santa tiene lugar la Muestra del Encaje de bolillos de Camariñas donde se promociona este arte y se llevan a cabo exhibiciones.
Cabo Vilán
Dicen de este faro que es uno de los lugares más bonitos de Galicia ya que se asienta en un espectacular enclave natural declarado Sitio Natural de Interés Nacional en 1933. Una de sus curiosidades es que a su mando estuvo durante 43 años una mujer, Cristina Fernández, pionera en esta profesión en España cuando sólo los hombres hacían esta labor y una de las últimas fareras de España.
Museo Man de Camelle
Manfred Gnädinger, más conocido como «Man», fue sin duda alguna una de las personalidades más emblemáticas de esta localidad marinera. Este entrañable pintor, escultor y filósofo alemán llegó a la Costa da Morte en 1962 para quedarse definitivamente.
Viviendo como ermitaño en total armonía con el mar y la naturaleza durante 40 años en una pequeña casa al lado del mar, se ocupó de construir un pequeño museo al aire libre con las rocas, piedras, conchas y otros materiales que el mar traía a la orilla.
Dejó como legado el único jardín marino del mundo del que, lamentablemente tras los fuertes temporales de la zona, hoy en día sólo quedan algunos restos que pueden visitarse. Por suerte, el Museo Man de Camelle recoge en su interior parte de su legado, mostrando su obra y vida de forma didáctica al visitante.
Ruta de los Naufragios/ Cementerio de los Ingleses
Sin duda otro de los símbolos que ver en Camariñas y parada obligatoria en cualquier ruta por la zona es el Cementerio de los Ingleses. Su historia está relacionada con los numerosos naufragios acaecidos a finales del siglo XIX que le valieron el sobrenombre de Costa da Morte.
Tras varios sucesos de importancia, el más trágico tuvo lugar el 10 de noviembre de 1890, cuando el acorazado inglés HMS Serpent embarrancaba en la traicionera punta do Boi junto a la Playa de Trece. El barco que había salido 2 días antes desde Plymouth para arribar a Sierra Leona se acabó hundiendo con sus 175 tripulantes a bordo, de los que fallecieron 172, enterrados en el mismo lugar por los vecinos de la zona.
Pero este no fue el único naufragio de estas costas, por eso para recorrerlos se ha creado la Ruta de los Naufragios formada por más de 60 puntos de interés, además del interesante Centro de Interpretación de naufragios, faros y señales marítimas situado en el faro de cabo Vilán.
La naturaleza y las playas
En la playa de Trece podemos disfrutar de la fascinante naturaleza de Camariñas. Aquí se encuentra la Duna de Monte Branco, una gran formación dunar moldeada durante milenios por la acción del viento. Un peculiar fenómeno que ha dado lugar a una de las dunas rampantes más grandes de Europa con sus más de 150 metros de altura.
+ Info: Turismo de Camariñas