Pueblos

Pueblos con encanto en Córdoba: un viaje a través del tiempo y la naturaleza

PRIEGO DE CÓRDOBA. Donde el tiempo se detiene.

Ubicado en la Sierra de la Subbética, Priego de Córdoba es uno de los tesoros que componen la provincia. Su casco antiguo, que ha sido reconocido como Conjunto Histórico-Artístico, transporta a los visitantes al pasado cuando se adentran sus las calles empedradas y su arquitectura. Uno de los principales atractivos es la Fuente del Rey, donde el sonido y las vistas de los surtidores del agua engloban la plaza en la que se sitúa. La Iglesia de la Asunción, el Castillo, el Barrio de la Villa y el Balcón del Adarve completan el recorrido. El viaje gana aún más encanto al contemplar las vistas panorámicas a los paisajes de la Subbética y sus olivares.

ZUHEROS. Pueblo encantador en las alturas.

También situado en pleno Parque Natural de las Sierras Subbéticas, Zuheros destaca por su ubicación sobre un acantilado. Al descubrir su Castillo, una fortaleza medieval en la cima del pueblo, contemplarás su imponente arquitectura mientras disfrutas del paisaje al campo cordobés. Tras transitar por sus plazas y rincones con casas blancas y macetas de flores coloridas, puedes visitar la Cueva de los Murciélagos, una maravilla subterránea que esconde un sinfín de estalactitas y estalagmitas. Y para disfrutar de una experiencia completa, puedes probar los famosos quesos de Zuheros en Los Balanchares, maestros queseros desde 1995.

ALMODÓVAR DEL RÍO. Un castillo en la colina.

Ningún cordobés ha pasado por alto el majestuoso castillo de Almodóvar del Río. El pueblo, ubicado en la comarca del Guadalquivir, es dominado por esta fortaleza ubicada en una colina. Se trata de uno de los mejores ejemplos de la arquitectura militar islámica en España, y desde sus murallas y torres se pueden avistar el río Guadalquivir y los paisajes de los alrededores. Para completar el viaje y seguir sumergiéndote en una historia que abarca varios siglos, el casco antiguo de Almodóvar alberga varias casas señoriales como la Iglesia de la Inmaculada Concepción, una construcción del siglo XVIII.

IZNÁJAR. Belleza acuática y encanto histórico.

De Iznájar destaca el embalse que rodea el pueblo y que se bautizó con el mismo nombre. Los amantes de la naturaleza podrán disfrutar no solo de las vistas a sus aguas, sino de actividades acuáticas y de los senderos que abrazan la zona. Del mismo modo que el resto de los pueblos más bonitos de Córdoba, a Iznájar no le falta su gran Castillo en la parte más alta del Barrio de la Villa, una ubicación privilegiada para ver las vistas al embalse y los campos de la Subbética. Al pasear por el casco antiguo encontrarás calles estrechas y empedradas, placitas con mucho encanto y casas blancas que se engalanan con flores para enriquecer la sinfonía urbana.