Arzúa, enclavada en la ribera del río Ulla, destaca como la cuna del queso con denominación de origen y la tierra de una miel preciada.

Arzúa, un lugar para descubrir y disfrutar en la senda del Camino Francés

Ubicada a orillas del río Ulla, Arzúa se presenta como la cuna del queso, con su propia denominación de origen, y también es conocida por su preciada miel. Estos productos emblemáticos se entrelazan con la esencia del Camino de Santiago Francés en su última parada antes de llegar a Santiago de Compostela. El patrimonio religioso de la localidad se evidencia en numerosas capillas e iglesias, entre las que destaca la Capela da Magdalena del siglo XIV, Dombodán o Fonte Santa.

Arzúa se encuentra inmersa en un entorno natural espectacular que complementa su riqueza cultural. Entre sus atracciones naturales, sobresale la Fervenza das Hortas, una impresionante cascada con una caída de 30 metros. Además, cuenta con el embalse de Portodemouros, una pintoresca playa fluvial y diversas rutas de senderismo que permiten a los visitantes explorar la belleza del paisaje circundante.

El lugar ofrece a los viajeros una experiencia completa, fusionando la tradición gastronómica con la herencia del Camino de Santiago y la belleza de su entorno natural. Ya sea explorando su patrimonio religioso, disfrutando de sus productos locales o sumergiéndose en la naturaleza, Arzúa se presenta como un destino que combina historia, cultura y paisajes cautivadores.

Arzúa le ofrece al visitante la posibilidad de conocer la huella que la cultura romana y, en especial, la cultura jacobea, dejaron en su territorio

+ info: Turismo de Arzúa