Un oasis urbano
El Campo Grande emana encanto y libertad. Con más de 11,5 hectáreas de vegetación, este oasis de tranquilidad en el corazón de la ciudad está cubierto de senderos, fuentes, arroyos, estanques, cascadas y curiosos habitantes como pavos reales en libertad. Limita con las tres zonas más emblemáticas del siglo XIX: la calle Acera de Recoletos, con edificios como la Casa Mantilla o la Casa del Príncipe; el paseo de los Filipinos, hogar del Museo Oriental; y el paseo de Zorrilla. Con animales, áreas para niños y paseos en barca por el estanque, el Campo Grande es una visita imprescindible para quienes exploran Valladolid en familia.